La niña ojos color marrón
Desde ese día solo veo la mirada de esa niña, con unos ojos marrones que ven a su al rededor y no comprenden del todo, lo que pasa a su alrededor. Y yo me veo a su lado caminando sobre esa linea férrea abandonada.
Por un momento antes de llegar a la linea férrea solo pensaba en el miedo y la vergüenza de que me vieran caminando por allí. La verdad es un lugar con una reputación muy mala, y estar allí siendo mujer no te viene bien de ninguna forma.
Antes de llegar hasta la linea, todo era normal, todos comprendemos que hay necesidad, que hay niños que no tienen los mismos recursos y algunos queremos ayudar, mientras otros solo queremos que se mejore la cosa, pero que otros lo hagan. Y así pasa la vida sabiendo que hay necesidad extrema pero que si hago algo, ayudo con dinero o pongo mi ofrenda en la iglesia esto ya se solucionó! salde mi cuenta en el cielo, con la sociedad, inclusive le di un "buen" ejemplo a mis hijos.
Pero como? COMO? devuelves la inocencia a una niña ojos marrón. Con que compras la niñez? a una niña ojos marrón. Como le dices que nada le pasará? cuando ya le robaron tanto! Como le dices que si es una buena niña nada le pasará? si ya le está pasando!
Y a pesar de esto el amor de una madre es incondicional, y la preocupación por que no le siga pasando se muestra en la llamada de una abuela, que pide ayuda para su nieto que vive frente a la niña de ojos marrón.
Al caminar hacia su casa la veo aferrada a la mano de mi compañero, y pierdo la vergüenza, mi instinto de protección sale y solo pienso... ¿Como la saco de aquí? Y me doy cuenta que solo ella tiene que salir y que ni el dinero, ni la ofrenda, ni todas las caridades del mundo servirán. Y aquí me encuentro desarmada con tan solo dos cosas a favor, la fe en mi Dios y la esperanza en que pueda darle tan solo una herramienta que le sirva para salir de aquí.
Compartir con este grupo de niños e ir a dejarlos a sus casas, no solo ha sido una gran lección, si no ha sido un motivo o sentido a mi vida tan "ocupada" y aunque fallé en el intento, y sea tan solo una niña ojos marrón y hayan miles de niñas en el mundo a las que no pueda ayudar, agarrarle su mano y decirle: "oye! juguemos" y así devolverle un poco de eso robado será un mínimo agradecimiento por lo que ella me enseñó.
Por un momento antes de llegar a la linea férrea solo pensaba en el miedo y la vergüenza de que me vieran caminando por allí. La verdad es un lugar con una reputación muy mala, y estar allí siendo mujer no te viene bien de ninguna forma.
Antes de llegar hasta la linea, todo era normal, todos comprendemos que hay necesidad, que hay niños que no tienen los mismos recursos y algunos queremos ayudar, mientras otros solo queremos que se mejore la cosa, pero que otros lo hagan. Y así pasa la vida sabiendo que hay necesidad extrema pero que si hago algo, ayudo con dinero o pongo mi ofrenda en la iglesia esto ya se solucionó! salde mi cuenta en el cielo, con la sociedad, inclusive le di un "buen" ejemplo a mis hijos.
Pero como? COMO? devuelves la inocencia a una niña ojos marrón. Con que compras la niñez? a una niña ojos marrón. Como le dices que nada le pasará? cuando ya le robaron tanto! Como le dices que si es una buena niña nada le pasará? si ya le está pasando!
Y a pesar de esto el amor de una madre es incondicional, y la preocupación por que no le siga pasando se muestra en la llamada de una abuela, que pide ayuda para su nieto que vive frente a la niña de ojos marrón.
Al caminar hacia su casa la veo aferrada a la mano de mi compañero, y pierdo la vergüenza, mi instinto de protección sale y solo pienso... ¿Como la saco de aquí? Y me doy cuenta que solo ella tiene que salir y que ni el dinero, ni la ofrenda, ni todas las caridades del mundo servirán. Y aquí me encuentro desarmada con tan solo dos cosas a favor, la fe en mi Dios y la esperanza en que pueda darle tan solo una herramienta que le sirva para salir de aquí.
Compartir con este grupo de niños e ir a dejarlos a sus casas, no solo ha sido una gran lección, si no ha sido un motivo o sentido a mi vida tan "ocupada" y aunque fallé en el intento, y sea tan solo una niña ojos marrón y hayan miles de niñas en el mundo a las que no pueda ayudar, agarrarle su mano y decirle: "oye! juguemos" y así devolverle un poco de eso robado será un mínimo agradecimiento por lo que ella me enseñó.
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